Mi Historia

Inicié Florería Suspiros hace más de 15 años, en el porche de casa de mis padres, con una mesa plegable, flores frescas y una visión clara: entregar emociones envueltas en pétalos. Empecé vendiendo por Facebook, en tiempos donde el comercio en línea apenas despegaba. No tenía un local, pero sí tenía propósito. Con cada ramo, fui ganando confianza, aprendiendo del cliente y sembrando relaciones duraderas.

Con el tiempo, transformé ese pequeño taller en una plataforma continental, conectando a cientos de talleres florales en toda Latinoamérica. Para lograrlo, estandaricé procesos, diseñé guías de calidad, automatizamos entregas y desarrollamos una red de florerías aliadas comprometidas con el servicio humano y profesional. Pasamos de hacer arreglos a construir una comunidad floral.

Después, junto a mi esposa Clariza, enfrentamos un nuevo reto: modernizar la panadería familiar, con más de 35 años de historia. No era solo actualizar máquinas, era cambiar mentalidades. Lo hicimos desde adentro, con respeto por lo tradicional, pero con una visión de eficiencia. Digitalizamos procesos, automatizamos ventas, analizamos datos y creamos un sistema que permitió multiplicar ingresos, optimizar tiempos y hacer crecer el negocio sin perder su esencia.

Ahí descubrí algo muy valioso: la tecnología no reemplaza el corazón de un negocio, lo potencia. Y entendí que mi experiencia podía ayudar a más emprendedores que, como yo, querían evolucionar sin perder su identidad.

De ahí nació mi nueva misión: ayudar a otros a transformar sus negocios tradicionales con herramientas modernas como inteligencia artificial, automatización y organización digital.

Hoy, después de más de una década de aprendizaje, errores, aciertos y muchas flores entregadas, sigo creyendo que el orden, la empatía y la estrategia pueden cambiarlo todo. Por eso comparto lo que sé, creo cursos, doy auditorías, y construyo con otros emprendedores una forma más humana y eficiente de hacer empresa.



Vivo en Monterrey, Nuevo León, México.
Vivo en Monterrey, Nuevo León, México.
Vivo en Monterrey, Nuevo León, México.

Herramientas

Lo poderoso no es la herramienta, sino cómo la usamos juntos.
Eso nos permite transformar negocios, automatizar procesos y liberar tiempo real para lo que importa.

A trabajar!!

A trabajar!!

A trabajar!!